miércoles, 4 de noviembre de 2015

Cambio climático amenaza sabores de la gastronomía argentina



Por Fabiana Frayssinet

MENDOZA, Argentina, 4 nov 2015 (IPS) - ¿Ajos menos rojos?, ¿un vino más traslúcido? El cambio climático también afectaría los sabores de la  mesa, de no tomarse medidas para mitigar los impactos del calentamiento planetario, que ya se percibens en cultivos claves para economías locales, como sucede en la provincia argentina de Mendoza.
Una exposición de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo), durante el Foro de Cambio Climático, realizado en octubre en Mendoza, la capital homonima de la provincia, con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo(PNUD), provoca ironías al mismo tiempo que alerta.
“¿Afectará el cambio climático la calidad del malbec?”, inquiere uno de los carteles sobre la más famosa cepa de vino argentino.
“El aumento de la temperatura disminuye el color de los dientes en ajo tipo morado y colorado”, concluye otro estudio de la experta en horticultura Mónica Guiñazú, de la facultad de Ciencias Agrarias.
Apreciaciones gastronómicas aparte, de cultivos como estos depende gran parte de la economía de esta provincia andina del centro occidental del país. Solo la vitivinicultura  representa  seis por ciento de su producto interno bruto.
“En nuestra economía regional, el malbec es la variedad más importante. Por eso la elegimos como objeto de estudio”, explicó Emiliano Malovini, uno de los investigadores sobre el “efecto del aumento de temperatura en la fisiología y calidad de la bayas del malbec”, de la cátedra de Fisiología Vegetal y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas.
En Argentina, “casi 90 por ciento de la superficie de ajo y de su producción salen de Mendoza”, añadió Guiñazú.
No es para que se alarmen todavía los catadores de vino, ni quienes usan como condimento al ajo, de probadas propiedades nutricionales y terapéuticas.
Pero en el caso del malbec, explicó Malovini a IPS, “proyectado el cambio climático y, por otro lado, lo que ya está pasando, de años muy cálidos, vemos una disminución en la calidad de las bayas”.
Malovini tomó como base el aumento térmico pronosticado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC) para fines de siglo, de entre dos y cuatro grados centígrados para estas latitudes sudamericanas.
Tanques de almacenamiento de una de las bodegas de la occidental provincia de Mendoza, en Argentina. El color distintivo del vino de la uva malbec, la principal de la viticultura de la zona, comienza a verse alterado por el impacto del cambio climático. Crédito. Fabiana Frayssinet/IPS
Tanques de almacenamiento de una de las bodegas de la occidental provincia de Mendoza, en Argentina. El color distintivo del vino de la uva malbec, la principal de la viticultura de la zona, comienza a verse alterado por el impacto del cambio climático. Crédito. Fabiana Frayssinet/IPS
“Lo que se observa en resultados preliminares es una pequeña disminución, en el color principalmente”, explicó al referirse a las antocianinas , compuesto químico que da el color del vino.
“Es muy importante porque para un vino de calidad o de alta gama, de alto precio, para  exportación, se necesita un cierto nivel de color mínimo en las uvas”, precisó.
En paralelo, “hay otro componente, el índice de polifenol en el vino, que es lo que posibilita guardarlo por más tiempo para hacer vinos de guarda (envejecimiento en botella) de dos o tres años”, añadió.
También se percibió un aumento en el alcohol y disminución de su acidez.
Si el cambio climático es irreversible, Malovini estudia técnicas para contrarrestar sus efectos, como aplicaciones hormonales y prácticas agronómicas, incluida la restricción hídrica en los viñedos.
También están preocupados los productores de ajo de Mendoza que hacen de Argentina el tercer exportador mundial, después de China y España, en un país donde más de la mitad de las ventas al exterior son de productos agropecuarios.
Las simulaciones concluyeron acortamientos del ciclo de cultivo de hasta 10 días, lo que en principio sería positivo, según Guiñazú,porque permitiría adelantar cosechas para otros mercados.
La mala noticia fue que ante un aumento de temperatura ambiental de cinco grados centígrados, y de grado y medio en el suelo, hubo una decoloración notable de los ajos colorados y morados.
“En Argentina, que pierdan color todavía tiene valor, no los desmerece visualmente. Pero en la Union Europea le dan mucha importancia. Se penaliza”,  destacó.
Según estimaciones del sector, la producción de ajos genera 10.000 empleos directos y 7.500  indirectos, y es un dinamizador de la región natural de Cuyo, especialmente de Mendoza y de la vecina provincia de San Juan.
Participantes del Foro de Cambio Climático recordaron que el recalentamiento global reducirá el agua proveniente de la nieve de las montañas, aumentando el proceso de desertificación en Mendoza. Además de provocar otros eventos climáticos como granizo o sequías.
“En los últimos cuatro años se detectó un déficit hídrico significativo. Que puede ser parte de la variabilidad histórica como también del cambio climático”,  señaló Daniel Tomasini, coordinador de ambiente y desarrollo sostenible del PNUD Argentina.
“Se espera que en los próximos años los ríos mendocinos disminuyan de 15 a 20 por ciento su caudal”, alertó en diálogo con IPS.
Un documento informativo del PNUD advierte que eso afectaría el rendimiento de las cosechas y  la calidad de vida de los pequeños productores  rurales.
“Corre riesgo no solo la seguridad alimentaria regional, sino las  producción de alimentos que se distribuyen al resto del país, que se exportan y contribuyen a sostener la matriz productiva”, acota.
Perspectiva que para Elena Abraham, del Instituto Argentino de Investigaciones de Zonas Aridas, aumentaría la inequidad social entre zonas secas y oasis productivos.
En Mendoza, 95 por ciento del territorio es desértico y solo 4,8 por ciento lo constituyen oasis irrigados, dónde se concentran 95 por ciento de sus 1.786.000 habitantes. La agricultura consume 90 por ciento del agua de la provincia.
Fuera de los oasis viven fundamentalmente pastores, dedicados a la ganadería extensiva de subsistencia, y pequeños productores agrícolas, relegados históricamente
“Vamos a tener un desierto en el más estricto sentido de la palabra.  Desierto viene de desertar, justamente. Y la gente se irá porque no tendrá ninguna opción de desarrollo, como ya lo está haciendo”, enfatizó Abraham a IPS.
Es la paradoja de una región del Sur en desarrollo que se prepara para mitigar los efectos de un cambio climático del que no practicamente responsable, pero si una víctima directa, ya que los expertos pronostican que Mendoza será una de las provincias más afectadas por la elevación de las temperaturas.
“El cambio climático dejó de ser una entelequia. Es el mundo en el que vivirán mis hijos y los hijos de mis hijos”, reflexionó durante el foro José Octavio Bordón,  presidente del Centro de Asuntos Globales de UNCuyo, que trabaja en la adaptación a sus efectos.
En el plano nacional, Argentina es el tercer emisor latinoamericanos de gases de efecto invernadero y el 22 del mundo, con 0,88 por ciento del total planetario,  según el Instituto Mundial de los Recursos (WRI, en inglés).
En sus contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional (INDC, en inglés), Argentina se comprometió a una reducción incondicional de esas emisiones de 15 por ciento para 2030, a la que suma otro 15 por ciento, condicionado a que se aporte financiamiento internacional para ello.
Ese compromiso, considerado “insuficiente” por ambientalistas locales e internacionales, integra las INDC que se incluirán en el tratado climático que debe aprobar la 21 Conferencia de las Partes (COP21) del Convenio Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CNMUCC), que se realizará en París en diciembre.
Además, la posición argentina es que “no vamos a reducir emisiones si eso genera problemas para nuestra gente, para el desarrollo nacional, pero las metas que proponemos son considerando esto”, puntualizó a IPS el subsecretario de Promoción de Desarrollo Sustentable,  Juan Pablo Vismara.
“Nos preocupa que se establezcan obligaciones (en París) que sean absolutas, como que tendremos una cuota o tope de emisiones. Hay que considerar que vamos a tener que seguir emitiendo, para desarrollarnos y combatir la pobreza, pero también porque damos un aporte alimentario para el mundo”, dijo el alto funcionario de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable del país.
Editado por Estrella Gutiérrez
Fuente: Inter Press Service Agencia de Noticias
http://www.ipsnoticias.net/2015/11/cambio-climatico-amenaza-sabores-de-la-gastronomia-argentina/

martes, 4 de agosto de 2015

Singular alianza de gauchos y ecologistas protege pampa argentina



BUENOS AIRES, 29 jul 2015 (IPS) - Las tradiciones de los gauchos (hombres de campo) y la moderna tecnología agropecuaria se unieron en Argentina, en una singular alianza entre ganaderos y ambientalistas, que busca conservar la biodiversidad de los pastizales y mejorar la productividad y sabor de su famosa carne.   
“Los parques nacionales dejan afuera al hombre. Quisimos pensar algo que integrara al hombre, pero también la actividad humana como un componente más del bioma”, explicó  Gustavo Marino, de Aves Argentinas.
“Vimos también que el pastizal de la pampa casi no tiene tierras públicas. Eran todas  privadas y necesariamente teníamos que trabajar con productores”, añadió Marino en diálogo con IPS.
El proyecto  cuenta con financiamiento del Fondo para el Medio Ambiente Mundial , gestionado por el Banco Mundial, y el apoyo del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria y la Administración de Parques Nacionales, ambos gubernamentales.
La iniciativa argentina forma parte de la Alianza del Pastizal para el Cono Sur, que integran también  Brasil, Paraguay y Uruguay.
Los pastizales “acuñaron una cultura representada por el gaucho pero que permea toda nuestra sociedad con comidas como el asado y esa necesidad que tenemos los argentinos de mirar espacios abiertos, el horizonte y el cielo”, reflexionó Marino.
Pero también son el corazón económico argentino.
Los gauchos han vivido por siglos en armonía con la naturaleza en la pampa argentina, cuyo bioma busca proteger un proyecto de conservación de sus pastizales y sabanas, que cuenta con la participación protagónica de estos tradicionales productores del campo. Crédito: Cortesía de Gustavo Marino/Aves Argentinas
Los gauchos han vivido por siglos en armonía con la naturaleza en la pampa argentina, cuyo bioma busca proteger un proyecto de conservación de sus pastizales y sabanas, que cuenta con la participación protagónica de estos tradicionales productores del campo. Crédito: Cortesía de Gustavo Marino/Aves Argentinas

“Los pastizales proporcionan una amplia gama de bienes y servicios ambientales, además de la provisión habitual de carne, leche, lana y cuero que producen los sistemas de pastoreo”, señaló a IPS el ambientalista Fernando Miñarro, coordinador en la FVSA del Programa Pampas y Gran Chaco.
Este bioma, constituido por más de 370 especies de gramíneas, 400 de aves y un centenar de mamíferos -algunos en extinción, como el venado de las pampas-  es fundamental para el  equilibrio ecológico.
“Contribuyen al mantenimiento de la composición de gases en la atmósfera, mediante el     secuestro de CO2 (dióxido de carbono), y al control de la erosión de los suelos, y son fuente de material genético para una gran cantidad de especies vegetales y animales que, actualmente, constituyen la base de la alimentación mundial”, subrayó.
Además, tienen una función fundamental como proveedor de insectos polinizadores y de enemigos naturales de numerosas plagas que atacan cultivos, agregó.
Según Marino, Argentina perdió 60 por ciento de sus pastizales, entre otras causas por el avance de la agricultura intensiva (soja y arroz entre otros cultivos), la expansión de la forestación comercial y la urbanización en sus partes más valiosas, por no ser inundables.
La iniciativa involucra a 70 productores y 200.000 hectáreas, y rescata tradiciones de la ganadería pampeana, perfeccionadas con nuevas técnicas agrarias y conocimientos ecológicos.
Entre ellas, Marino citó la rotación del pastoreo para descansar la tierra,  la zonificación de los potreros de acuerdo al crecimiento florístico del pastizal o la quema “bien practicada”. Estas prácticas estimulan especies de alta calidad forrajera, explicó.
También aprovechan cuando las inundaciones, construyendo pequeñas lomadas para retener el agua más tiempo.
Con eso controlan las plantas exóticas y hacen proliferar pastos tiernos, de buena calidad para el ganado que, a su vez, atraen las aves,  como los chorlos (Pluvialis dominica).
“Es nuestro ejemplo más redondo. Por un lado pensamos en la producción de carne y por el otro en la calidad del hábitat para los chorlos”, ilustró Marino sobre lo que definió como  “ganadería de precisión”, adaptada a cada tipo de pastizal.
Marino, agrónomo y observador de pájaros, recordó que hace ocho años cuando comenzó el proyecto, los ganaderos los veían como “bichos raros”.
Pero actualmente, continuó,  cada vez más  buscan su asesoramiento porque “les proponemos encontrar un punto medio que genere riqueza y al mismo tiempo mantenga la biodiversidad”.
“Al perder biodiversidad, el ganadero tiene que comprar forraje o nutrientes para mejorar la respuesta. Los insumos son caros y están atados a los precios de mercado. Conservar los pastizales naturales beneficia al ganadero ya que es ni más ni menos que el capital natural en el que se basa su actividad económica”, precisó Miñarro.
También se benefician con el mayor precio que obtienen al contar ahora, gracias a los cambios introducidos en sus procesos productivos, con el  sello ecológico “Carne del Pastizal”, que les abre además mercados de exportación.
“El consumidor quiere saber cada vez más cómo es el sistema de producción y este sello les cuenta eso: que es carne de base pastoril, ecológica, que respeta la biodiversidad y que tiene el sabor de la carne tradicional argentina, que nos hizo famosos mundialmente”, sintetizó Marino.
Otra renta la obtienen del ecoturismo de observación de pájaros. El programa los promociona, asesora y capacita guías.
Es el caso de Tiziana Prada, propietaria de la hacienda San Antonio, de  4.918 hectáreas con unos 2.000 animales, en los Esteros del Iberá, en la nororiental provincia de Corrientes, donde se práctica la ganadería sustentable.
“Empezamos por reconstituir lo que eran viejas arroceras y pasaron a ser de nuevo campos naturales de pastizales. La fauna empezó a verse más, hay muchos ciervos, volvieron los monos carayá, los yacarés y muchísimas especies de aves”, contó a IPS.
Eso fue resultado de las nuevas técnicas utilizadas.
“Conociendo los ciclos de los pastos de buena calidad uno puede ir manejándolos según los ciclos de crecimiento… Siempre pensando en los momentos de migración de las aves y de los animales que los habitan”, relató.
Para esta hacendada el cuidado ambiental y mantener la productividad “van de la mano”.
“El ganadero, especialmente ahora que la ganadería está moviéndose a zonas marginales, donde el ecosistema es mucho más frágil, tiene que producir conservando porque si no tu recurso se destruye. No sería sostenible en el tiempo y además creemos fervientemente que se puede producir en forma sustentable sin bajar la eficiencia”, enfatizó.
Prada entiende que el interés entre ganaderos crece porque perciben “que hay un mercado urbano cada vez mayor que exige que conserves el ambiente para que sus hijos el día de mañana tengan un mundo mejor”.
Además porque no se trata solo de un negocio. “El amor por la naturaleza, es algo que la gente de campo lleva adentro”, destacó.
Marino sintetiza ese espíritu con una estrofa  del intérprete folklórico argentino Atahualpa Yupanqui. “Estoy con los de mi lao cinchando tuitos parejos, pa hacer nuevo lo que es viejo y verlo al mundo cambiao”, dice la canción “El payador perseguido”.
“Es volver a la ganadería tradicional, pero aplicando la tecnología de hoy”, interpretó.
Editado por Estrella Gutiérrez
Fuente: IPS Inter Press Service
http://www.ipsnoticias.net/2015/07/gauchos-protagonizan-singular-alianza-para-proteger-pampa-argentina/

Cambio climático: Obama y su "ambicioso" plan contra las emisiones de CO2



Con un ambicioso plan para reducir las emisiones de carbono de las centrales eléctricas de todo el país, el presidente Barack Obama quiere que Estados Unidos haga su parte para aminorar su contribución al cambio climático.

"Solamente tenemos un hogar, un planeta. No hay un plan B", dijo Obama en un discurso en la Casa Blanca, en el que se insistió en que el cambio climático no es un problema de las generaciones venideras sino que llama ya está aquí.
El "Plan de Energía Limpia" busca reducir para 2030 en un 32% las emisiones de las centrales termoeléctricas respecto a los niveles de 2005.
"Somos la primera generación en sentir los impactos del cambio climático", aseguró el presidente, criticado por la oposición republicana que calificó el plan de Obama como una "guerra contra el carbón".
El plan, al que Obama se refirió como el "mayor, más importante paso dado hasta ahora", es la versión definitiva del que adelantó hace un año la Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por su sigla en inglés), que fue sometida a comentarios públicos.
Cada estado tendrá un objetivo de reducción de emisiones asignado y deberá enviar una propuesta a la EPA de qué acciones tomará para cumplirlo.

Conferencia de París

El anuncio viene pocos meses antes de que se celebre en París la conferencia internacional de la ONU, en la que se espera que los países alcancen un acuerdo vinculante para limitar que el calentamiento global supere dos grados, respecto a los valores preindustriales.
Obama considera este plan como la piedra angular de su intento de asegurar un tratado global en esta reunión, que haría muy difícil a su sucesor echarlo para atrás, explica Matt McGrath, corresponsal de medioambiente de BBC.
La economía de algunos estados está fuertemente vinculada a las centrales eléctricas de carbón, como Wyoming, Virginia Occidental y Kentucky, y sus líderes temen el impacto que estas medidas pueden tener, sobre todo en el empleo.
Obama rechazó la idea de que el plan es una "guerra al carbón" que eliminará empleos y, al contrario, subrayó que habrá inversiones en estas áreas.
El gobierno federal aseguró además que dará a los a los estados tiempo para cumplir con la nueva normativa.

Legado

Cada estado tendrá un objetivo de reducción de emisiones asignado y deberá enviar una propuesta a la EPA de qué acciones tomará para cumplirlo.
La aspirante a la candidatura demócrata para las presidenciales de 2016, Hillary Clinton, aseguró que defendería el plan si fuera elegida en las elecciones.
"Necesitará ser defendido", dijo Clinton que señaló que criticó que "los candidatos republicanos a la presidencia - no ofrecen ninguna solución creíble".
En el lado republicano, el aspirante Marco Rubio aseguró que el plan sería "catastrófico", mientras que el exgobernador de Florida Jeb Bush dijo que es un proyecto "irresponsable" y sería "un desastre".
El presidente espera que el anuncio garantice su legado sobre el cambio climático, señala Tom Bateman, corresponsal en Washington de la BBC
Las medidas podrían dar a Obama la autoridad moral que necesita para argumentar sobre las reducciones de gases de efecto invernadero en la conferencia de París.
Esta versión del plan hace un énfasis especial en fuentes de energía renovables, frente al texto original que abogaba por acelerar la transición de plantas de carbón a plantas de gas natural, que emite menos dióxido de carbono.
Las plantas eléctricas son la principal fuente de emisión de gases de efecto invernadero en Estados Unidos, responsables de aproximadamente un tercio del total de emisiones estadounidenses.
Fuente. BBC
http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/08/150803_eeuu_obama_plan_emisiones_carbono_ep

jueves, 9 de abril de 2015

"Corte" al reclamo ambiental


La Corte de Salta rechazó un amparo colectivo interpuesto por un grupo de ambientalistas contra la instalación de una fábrica de nitratato de amonio. Para el Tribunal, "no se acreditaron los presupuestos de admisibilidad del amparo".

Los integrantes de la Corte Suprema de Justicia de Salta dictaron sentencia en los autos “Zaindemberg, Hugo Ricardo; De San Román, Fernando Santiago; Rivadeo, Graciela y otros vs. Nitratos Austin S.A. – amparo – recurso de apelación”. De esta forma, el Tribunal confirmó por mayoría el rechazo de un amparo promovido contra la instalación de una planta química en la zona.

Los actores llevaron adelante una acción colectiva de amparo ambiental -arts. 41 y 43 de la Constitución Nacional; art. 87 de la Constitución Provincial; art. 30 de la Ley 25675 y Ley Provincial 7070- contra la empresa Nitratos Austin S.A. El proyecto tiene como fin la instalación de una fábrica de nitrato de amonio, una sustancia que se utiliza como materia prima para fabricar explosivos para megaminería.

El eje de la demanda se centró "en el daño temido para el medio ambiente y el desarrollo sustentable de la región derivado de la argüida ilegitimidad en el trámite de la expedición del Certificado de Aptitud Ambiental emitido por la Secretaría de Industria, Comercio y Financiamiento de la Provincia, a raíz de los supuestos vicios en el procedimiento administrativo de toma de decisión".

La pretensión de fondo buscaba “enervar la operatividad del Certificado de Aptitud Ambiental otorgado por la Resolución nº 34/12 de la Secretaría de Industria, Comercio y Financiamiento de la Provincia”. La sentencia apelada había rechazado la acción por entender que “debió accionarse contra la autoridad pública que había emitido tal certificado, (...) por entender que la vía del amparo no era idónea para canalizar el debate sobre tal cuestión”.

El juez de grado consideró que "en el caso hubo una falencia en la legitimación pasiva porque al pretenderse enervar la operatividad del Certificado de Aptitud Ambiental otorgado por la Resolución nº 34/12 de la Secretaría de Industria, Comercio y Financiamiento de la Provincia, se debió accionar contra la autoridad pública que lo emitió, gozando dicho acto de presunción de legitimidad".

En esta línea añadió: "Si bien los actores hacían alusión a una lesión consumada a los derechos a la salud y el medio ambiente, no habían aportado ninguna prueba al respecto; en tal sentido indicó que de la inspección ocular realizada, personalmente pudo constatar que aún no se ha instalado planta química alguna pudiendo observar sólo desmontes y movimientos de suelo y que, en la especie, de los informes incorporados a la causa surgía -en definitiva- que el controvertido acto fue dictado en el marco del debido proceso y de conformidad con lo establecido en la Ley 7070 y en la Ley 5348 de Procedimiento Administrativo de la Provincia".

Por mayoría, el Supremo Tribunal provincial afirmó que "el recurso articulado por los actores era insuficiente". Por otro lado, los magistrados destacaron que "los apelantes han limitado su discurso a discrepar con el criterio del juez sin concretar una crítica razonada de las partes del fallo".

De esta manera, los integrantes de la Corte salteña consideraron que "la vía del amparo no era adecuada para litigar el conflicto ya que no se acreditaron los presupuestos de admisibilidad del amparo, inferencia que los razonamientos de los apelantes no consiguieron revertir toda vez que ni el aspecto colectivo ni el objeto ambiental de la acción tienen virtualidad jurídica para alterar la esencia del amparo como proceso de tutela judicial urgente en cuyo ámbito debe necesariamente acreditarse los requisitos constitucionales que la tornan proponible y tramitarse con resguardo de los correlativos derechos a ser oído y de ofrecer y producir prueba a quien se le impute una acción u omisión vulneratoria de derechos constitucionales”.

A lo largo de la sentencia, el Tribunal recordó los diversos precedentes de la Corte Suprema de Justicia en materia de tutela colectiva del medio ambiente. “La mejora o degradación del ambiente beneficia o perjudica a toda la población, porque es un bien que pertenece a la esfera social y transindividual, y de allí deriva la particular energía con que los jueces deben actuar para hacer efectivos estos mandatos constitucionales”, agregó el fallo.


Fuente:
Diario Judicial
Jueves 26 de Marzo de 2015

SANTA FÉ POSTERGÓ POR CUARTA VEZ LA PUESTA EN MARCHA DEL SAO, QUE HABÍA SIDO DISPUESTA EN FEBRERO DE 2014

Un año después de haber sido dictado el decreto original, la provincia de Santa Fe postergó por cuarta vez consecutiva la puesta en vigencia de la normativa complementaria que permite empezar a exigir a los obligados la contratación del seguro ambiental obligatorio en esa jurisdicción.

La prórroga, por 180 días, fue dispuesta mediante el Decreto Nº 0144/15, de fecha 4 de febrero de 2015, fundada en un pedido de la Federación Industrial de Santa Fe, que invoca que es limitada la lista de compañías de seguros que ofrecen este tipo de coberturas. La prórroga anterior, fue dispuesta por los mismos motivos, mediante el Decreto N° 2267/14, del 29 de julio de 2014.

La realidad es que la oferta del SAO está absolutamente ajustada al mercado, a través de empresas aseguradoras, brokers y productores asesores, capacitados para informar acerca de los alcances del SAO y pactar operaciones. 

La provincia de Santa Fe dispuso la obligación a través del Decreto N° 1879/13, de fecha 17 de febrero de 2014, en el que estableció que las personas físicas o jurídicas, públicas o privadas que deseaban obtener o mantener vigentes las respectivas habilitaciones, Informe Ambiental de Cumplimiento, permisos e inscripciones que otorga el Poder Ejecutivo a través de la Autoridad de Aplicación cuyo Nivel de Complejidad Ambiental (NCA) en los términos de la Resolución N° 177/07, modificatorias, ampliatorias y complementarias de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación (SAyDS) sea igual o mayor a catorce (14) puntos, debían acreditar en el plazo de treinta (30) días de publicado el decreto, la contratación de un Seguro por Daño Ambiental de Incidencia Colectiva en observancia a lo establecido por el Artículo 22 de la Ley General del Ambiente -N° 25.675- y las normas reglamentarias. La presentación del seguro será condición previa al comienzo de las actividades en los términos de los Capítulos VIII y X de la Ley N° 11.717.

La primera prórroga por 180 días fue dispuesta a través del Decreto N° 2336/13, de fecha 13 de agosto de 2013. La segunda prórroga fue dispuesta mediante Decreto N° 0277/14 el 6 de Febrero de 2014. La tercera prórroga fue decidida el 29 de julio de 2014, por Decreto N° 2267/14.

Publicado el 3 de Marzo de 2015 por Cámara Argentina de Aseguradoras de Riesgo Ambiental (CAARA)

EL SAO ESTÁ PLENAMENTE VIGENTE TAL COMO FUE CONCEBIDO EN LA NORMATIVA ORIGINAL

Un reciente fallo de la Corte Suprema de Justicia no revocó la medida cautelar de un tribunal de primera instancia que mantiene suspendidas dos normas del Poder Ejecutivo (PEN) que modificaban la práctica y el espíritu fundacional del sistema, concebido como una herramienta de política ambiental. A raíz de que el fallo de la Corte fue difundido e interpretado erróneamente por diversos medios, el presidente de CAARA, Sr. Jorge E. Furlan, envió una Carta de Lector aclaratoria al diario La Nación.


La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó sin efecto la sentencia la Sala II de Feria de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal que había ratificado mediante una medida cautelar el fallo dictado el 26 de diciembre de 2012 por el Juzgado Contencioso Administrativo Federal Nº 9 de la Capital Federal en la causa Nº 56.432/12 caratulada "Fundación Medio Ambiente c/ EN –PEN- Dto. 1638/12 –SSN-Resol 37160 s/ proceso de conocimiento".

El 11 de diciembre de 2014, en el Expte. CSJ219/2013 (49-F), la Corte resolvió el Recurso de hecho deducido por el Estado Nacional en la causa haciendo lugar a la queja. Declaró procedente el recurso extraordinario interpuesto y dejó sin efecto la sentencia apelada, a la vez que ordenó que el caso sea nuevamente resuelto mediante un pronunciamiento que cuente "con fundamentos razonados que lo sostengan como acto constitucionalmente válido". No obstante, en su Resolución La Corte no analiza ni hace referencia alguna al fallo de Primera instancia en el que se dictó la medida cautelar cuestionada por el Poder Ejecutivo. 

Por ende, continúan vigentes la suspensión de los efectos del Decreto 1638/12 y la Resolución SSN 37160 así como las normativas originales del Seguro Ambiental Obligatorio (SAO), que determinan que, a la fecha, el único instrumento que permite cumplir con la obligación del Art. 22 de la Ley 25.675 es la Póliza de Caución por Daño Ambiental de Incidencia Colectiva.

Mediante las medidas que continúan suspendidas, esto es, el Decreto 1638/2012 y la Resolución SSN 37160, se pretendía modificar y derogar parcialmente normas del sistema del SAO, transformando una valiosa herramienta de política ambiental en un mero e ineficiente sistema indemnizatorio.

A raíz de que el fallo de la Corte fue difundido e interpretado erróneamente por diversos medios, así como fue motivo de asesoramiento inadecuado por parte de estudios jurídicos a empresas obligadas a la contratación del seguro, el presidente de CAARA, Sr. Jorge E. Furlan, envió una Carta de Lector aclaratoria al diario La Nación, que la publicó en toda su extensión en la edición del día 9 de enero de 2015. El texto de la Carta es el siguiente:

Sr. Director: Atento a lo sugerido en la Editorial II, titulada Navegación en el Riachuelo, publicada en la edición del pasado viernes 2 de enero de La Nación, nos parece oportuno precisar en relación con el Seguro Ambiental Obligatorio (SAO), que en su fallo CSJ 219/2013 (40-F) del 11 de diciembre 2014 en el expediente "Fundación Medio Ambiente c/EN-PEN – DTO. N° 1638/12 – SSN – Res. N° 37160 s/ medida cautelar autónoma", la Corte Suprema de Justicia de la Nación no derogó la medida cautelar dictada el 26 de diciembre de 2012 por el Juzgado Contencioso Administrativo Federal 9 en la causa Nº 56.432/12, "Fundación Medio Ambiente c/ EN –PEN- Dto. 1638/12 –SSN-Resol 37160 s/ proceso de conocimiento", mediante la cual este juzgado suspendió la aplicación del Decreto 1638/2012 y de la Resolución SSN 37160. Mediante estas dos normas, el Gobierno Nacional modificó y derogó, parcialmente, la reglamentación del SAO, declinando una herramienta de gestión ambiental a favor del establecimiento de un régimen puramente resarcitorio. Tal cautelar fue oportunamente ratificada el 29 de enero de 2013 por la Sala II de Feria de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal.


Publicado el 3 de Marzo de 2015, por Boletín Informativo de la Cámara Argentina de Aseguradoras de Riesgo Ambiental (CAARA)